Ayer, como cada tercer domingo de julio, la parroquia de San Miguel de Bouzas celebró la ofrenda al Buen Jesús de los Afligidos presidida por el obispo de Tui-Vigo, Mons. Luis Quinteiro Fiuza y realizada por la registradora de la propiedad en Vigo, Margarita Alconchel Saiz-Pardo.
Durante la ofrenda, que tiene lugar tras la lectura del Evangelio, Margarita Alconchel Saiz-Pardo, destacó la labor de Cáritas —tanto a nivel diocesano como parroquial— y sus esfuerzos por “aliviar las escaseces que sufren nuestros hermanos más necesitados”. Ante el Buen Jesús de los Afligidos, la oferente manifestó: “amadísimo Cristo, vengo, venimos, a ofrecerte nuestra caridad y a pedirte que nos des un corazón generoso que sienta el dolor del hermano como propio, para que sepamos darnos, con nuestra oración y nuestros bienes, a ellos”.
Por su parte, Mons. Luis Quinteiro invitó a los allí congregados a transmitir con sencillez la devoción del Buen Jesús de los Afligidos que definió como “una fiesta llena de emoción, de entusiasmo y piedad; una fiesta encarnada en todo el mundo”. En este sentido, exhortó a toda la comunidad parroquial a convertirse “en una Iglesia en salida que no se encierra en sí misma porque hay muchas personas que buscan la vida”, recordando además que “el compromiso cristiano no nace de un razonamiento, sino de un corazón tocado por el amor de Dios”.
Previamente a la celebración de la ofrenda, la parroquia celebró la novena en honor al Buen Jesús de los Afligidos con la participación del sacerdote diocesano Antonio Menduiña, doctor en Biblia y rector del Seminario Menor de Tui, que acudió a predicar desde el jueves y hasta el sábado.