Mensaje con motivo de la campaña «Contra el hambre» de Manos Unidas 2023
Una vez más en este mes de febrero, Manos Unidas llama a la puerta de nuestro corazón para despertarnos de nuestros olvidos y recordarnos algo tan dramático como que en el mundo se mueren de hambre, cada año, 8,7 millones de personas y que los niveles de desigualdad en el mundo no solo no se recortan, sino que aumentan cada día más.
En el mundo sigue aumentando el abismo que separa a las personas más ricas de las más empobrecidas. Ahora bien, el mensaje de Manos Unidas no se queda en esta denuncia escandalosa, sino que nos invita, y esa es su gran misión, a hacer un esfuerzo global en el que todos y cada uno de nosotros trabajemos para combatir esas dolorosas condiciones de vida de tantos millones de personas y liberarlos del yugo del hambre y de la pobreza.
Con frecuencia, la desigualdad se presenta en nuestra vista con rostro alarmante en la vecindad de nuestras casas. Por poco que uno se acerque a hogares necesitados de nuestro entorno social, percibe las señales de una injusticia lacerante. En nuestra proximidad hay personas que viven pobremente y algunas carecen de lo más indispensable para vivir. No hace falta alejarse de nuestras calles para ver esas realidades. Entre nosotros existen desigualdades escandalosas. Están ahí, solo hay que abrir los ojos para verlas.
Es muy sorprendente el modo cómo llegamos muchos de nosotros a acostumbrarnos a ver las desigualdades sociales como algo que no nos afecta. Esto tiene que ver con nuestra manera de ver el mundo y las personas. No miramos para los otros, nos miramos a nosotros mismos en todo lo que nos rodea. La tendencia del ser humano es a ensimismarse en las cosas, haciendo que disminuya o desaparezca nuestra responsabilidad ante las situaciones más graves. Sin una ascesis personal seriamente asumida, nuestra comodidad se hace dueña de nuestra vida. Y lo mismo pasa en la vida de nuestras sociedades con consecuencias muy graves para los más débiles y desheredados.
La desigualdad se ha convertido en la mayor amenaza y en el mayor desafío a nivel mundial. Pero hay algo peor y es que muchas personas han renunciado a afrontar esta terrible realidad y piensan que la desigualdad y el hambre en el mundo son un reto imposible, un problema sin solución ante el que no se puede hacer nada.
Manos Unidas nos dice este año, y con un compromiso sostenido, que la solución al problema de la desigualdad y del hambre en el mundo está en nuestras manos. Y nos recuerda que, para hacer frente a la desigualdad, todas las manos suman, todas cuentan y todas son necesarias.
El lema de la campaña de este año 2023 es «Frenar la desigualdad está en tus manos». Manos Unidas nos llama a cada uno de nosotros a dar un paso adelante. El hambre en el mundo no es el destino fatal de una humanidad sin futuro. Cada hombre ha de tomar conciencia de que el futuro de la humanidad pasa por su vida. Solo así tendrá sentido la vida del hombre y será posible un mejor futuro para la humanidad.
Con mi afecto y oración.
+ Luis Quinteiro Fiuza,
obispo de Tui-Vigo