Con motivo de la fiesta de santo Tomás de Aquino, que la Iglesia celebra el 28 de enero, el Centro Teológico «San José» de Vigo ha organizado una seria de actos para conmemorar al patrón de los teólogos. A las 12 horas, el obispo de Tui-Vigo, Mons. Luis Quinteiro, presidió la eucaristía en la capilla del Seminario Mayor, seguida posteriormente del acto académico con la ponencia «La oración apostólica en la vida del presbítero».
Durante la eucaristía, Mons. Luis Quinteiro destacó el ejemplo de santo Tomás de Aquino, como un hombre que «cree en la capacidad de la inteligencia para entender y acercarse a la Verdad, que, cuando se identifica con Cristo, cambia la vida del hombre». En este sentido, recordó que la Iglesia tiene que estar en el ámbito de la discusión filosófica de nuestro tiempo, «pero, en el mundo de hoy, estamos llamados a ser testigos fieles de Jesucristo, redentor. La figura de santo Tomás continúa siendo actual porque nos invita a renovar nuestra convicción de que la verdad en la vida es posible y, desde la fe, esta verdad se encarna en Jesucristo».
El doctor en Teología y profesor de la Universidad Pontificia de Comillas, Ángel Cordovilla, impartió la ponencia «La oración apostólica en la vida del presbítero», en el salón de actos de Seminario, una vez finalizada la celebración eucarística. Durante su intervención, el profesor Cordovilla departió acerca de la oración como «una relación con Dios y en ese sentido, el ser del hombre dirigió hacia Dios, puesto delante de Dios en reverencia de amor» y, también, de la doble perspectiva de la oración en la vida del sacerdote «la oración para cultivo de su propia espiritualidad y vida cristiana y la oración como una forma de ejercicio de su ministerio».
El Centro Teológico «San José» de Vigo nace al amparo del Seminario Mayor en el curso 1999-2000, como centro afiliado a la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca. Su principal tarea consiste en formar académicamente a quienes se preparan para el ministerio pastoral, ofreciendo formación permanente para presbíteros y seglares.