El pasado sábado, 5 de septiembre, don Jesús Carracero, párroco del Sagrado Corazón de Jesús asistía a la inauguración del nuevo Centro Cultural Islámico de Vigo instalado en Gregorio Espino.
El acto, en el que participaron diversas personalidades de organismos públicos, comenzó a las once de la mañana con un saludo de portavoz del Centro Islámico, Abdulraheem Uzairi. A este saludo, le siguió un vídeo representativo de las actividades realizadas en el centro y la entrega de las llaves del propietario del local a Abdulraheem.
Después, le tocó el turno a don Jesús. El párroco del Sagrado Corazón declaró que fue “la Caridad quien nos ha unido a los musulmanes que residen en nuestra ciudad con los cristianos”.
A lo largo de su intervención, este sacerdote diocesano señaló la importancia de valorar el papel de las religiones al servicio de la caridad, que «nace de su fe y de su culto». De ahí, la invitación a reconocer la importancia de los símbolos, como una manifestación de «la alegría de la pluralidad, de la riqueza de culturas y tradiciones espirituales» en el marco de la crisis simbólica e iconoclasta que estamos viviendo.
¿Cómo la caridad ha unido a musulmanes y cristianos?
Desde hace treinta años, la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús enseña castellano a los inmigrantes provenientes de África; muchos de ellos, musulmanes. A través de esta labor social nacieron las relaciones ecuménicas entre ambas comunidades religiosas.
Durante la pandemia, el párroco percibió las dificultades económicas de muchos de los jóvenes que asistían a las clases. Por eso, decidió ponerse en contacto con Abdulraheem, responsable de la comunidad islámica en Vigo. Juntos, cristianos, musulmanes y evangelistas, han conseguido ayudar a las familias.