La comunidad parroquial de Soutomaior ha conseguido llevar a cabo de una de las acciones propuestas en el Plan Pastoral del curso 2021-2022, «fortalecer la red diocesana de Cáritas», mediante la creación de un equipo de Cáritas parroquial que, el pasado sábado, 11 de noviembre, inauguró, de manera oficial, el plan de actividades caritativas previsto para este nuevo curso con una eucaristía que presidió el obispo de Tui-Vigo, Mons. Luis Quinteiro, y que contó con la presencia del presidente de la institución diocesana, Gonzalo Davila.
Ante la falta de un recurso de este tipo próxima a esta parroquia rural —la Cáritas más próxima está ubicada en Arcade—, comienza a fraguarse esta iniciativa en abril de 2022, con el acompañamiento y la formación impartida desde el Programa de Animación Comunitaria ofrecido desde Cáritas de Tui-Vigo a todas las parroquias de la geografía diocesana. Antía Herrero, coordinadora del equipo parroquial de Cáritas, explica que la formación «nos ayudó mucho a abrir miras de cara a conocer lo que es Cáritas hoy, en la actualidad, lo que realmente hace falta. No es solo ofrecer comida o dinero, sino que hay otras muchas cosas que la comunidad necesita y que nosotros podemos ofrecer para ayudar».
En este primer curso, la Cáritas parroquial de Soutomaior se centrará, tal y como explica su coordinadora, en «combatir la soledad que pueda haber en nuestra parroquia», para ello están elaborando una serie de talleres lúdicos, como el bingo, de risoterapia o de mejora de la capacidad cognitiva de su población diana formada, en su práctica totalidad, por personas mayores. Por el momento, el equipo que llevará a cabo todas estas iniciativas lo configuran cuatro mujeres, Antía, Marcelina, Rocío y María José, acompañadas por su párroco, Gabriel Gómez, pero como manifiesta Herrero «nuestro proyecto de futuro, y a donde estamos mirando, es que todo el mundo que quiera acercarse, echar una mano y colaborar está más que bienvenido».
Durante la celebración inaugural del pasado 11 de noviembre, el prelado de Tui-Vigo manifestó que «la Iglesia hoy se da cuenta de que la misión esencial de una comunidad cristiana es abrirse a la caridad. Por lo tanto, una comunidad cristiana está llamada a organizar la caridad, a desarrollar la dimensión caritativa de su asamblea». La parroquia de Soutomaior se abre, así, a esa dimensión de la caridad, para encarnar el misterio de Jesús en la realidad cotidiana de las personas de la comunidad que allí peregrina.