El 2 junio, solemnidad de Corpus Christi y Día de la Caridad, la diócesis de Tui-Vigo renovó su devoción al Santísimo Sacramento. El obispo y administrador apostólico, Mons. Luis Quinteiro, presidió la misa solemne, por la mañana, en la catedral tudense y, por la tarde, en la concatedral-basílica en Vigo, seguida, en ambos casos de la tradicional procesión, que constituye una oportunidad para que los católicos den testimonio público de su fe.
Mons. Luis Quinteiro expresó que «la eucaristía es la perla, el tesoro, el corazón de nuestra fe» y, a través de la solemnidad de Corpus Christi, «queremos renovar nuestra fidelidad a la eucaristía», para no vivirla como algo rutinario. En este sentido, el prelado manifestó que «si somos fieles a la eucaristía, la Iglesia se renovará», porque «la eucaristía significa vivir nuestra vida de fe donde estamos, ser caritativos, ayudar a los hermanos, atender al que está solo y necesitado, dar de comer al que pasa hambre… El mundo de hoy necesita de personas generosas, que sean capaces de renovar los modos siendo fieles a su conciencia, a los grandes valores de la vida».
En esta fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, se rememora que Cristo está presente verdadera, real y sustancialmente en el pan y el vino consagrado; una presencia que se prolonga fuera de la misa en el sagrario. En este día, la Iglesia también celebra el Día de la Caridad, bajo el lema «Allí donde nos necesitas, abrimos camino a la esperanza».