La celebración del Año Jubilar Josefino comenzó el pasado 1 de mayo en la parroquia viguesa de San José Obrero y Santa Rita, con una misa presidida por el obispo Luis Quinteiro, coincidiendo con la solemnidad de San José Obrero, patrón de los trabajadores.
«La Iglesia debe renovar su llamado, anuncio y compromiso con las personas que no tienen trabajo», declaró el obispo Mons. Luis Quinteiro durante su homilía, destacando el importante papel del trabajo en la dignificación de la persona no sólo porque ofrece sustento, sino porque la asocia con la creación de la vida.
El pastor de la Iglesia de Tu-Vigo también invitó a los presentes a fijar la mirada en san José que, a través del ejercicio de su paternidad, se ha convertido en un ejemplo cariñoso, tierno, fiel y trabajador para todos los padres.
Al término de la celebración, se estrenó la oración a san José publicada por el papa Francisco en su carta apostólica Patris Corde —Corazón de Padre—, que el prefecto de música de la catedral de Tui, Daniel Goberna, ha musicalizado con la colaboración de María Mendoza en los arreglos. La grabación de esta oración, Salve Custodio, está disponible a través del canal de YouTube de la Diócesis, gracias también a la participación de varios jóvenes diocesanos y a alumnos del Colegio San José de Cluny que han puesto sus voces al servicio de la Iglesia Diocesana para sacar adelante este proyecto.
A lo largo de los próximos meses, se organizarán otro tipo de actividades y celebraciones en las cinco iglesias dedicadas a la figura de san José —cuatro templos parroquiales y una capilla— en Chandebrito, A Laxe, Ribarteme, Vigo y Prado, a los que también se suma la iglesia de la Sagrada Familia situada en esta ciudad olívica.
El Año Jubilar coincide con el 150 aniversario de la declaración firmada por el beato Pío IX en la que declaraba a san José como Patrono de la Iglesia Católica. Para profundizar en el sentido de esta convocatoria, el obispo de Roma ha explicado en su carta apostólica Patris Corde —Corazón de padre—, que «San José nos recuerda que todos los que están aparentemente ocultos o en “segunda línea” tienen un protagonismo sin igual en la historia de la salvación».
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