28 de marzo de 2024

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San Sixto III
28 de marzo de 2024

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San Sixto III

Mons. Luis Quinteiro: «La cruz de Cristo es nuestra victoria»

Mons. Luis Quinteiro: «La cruz de Cristo es nuestra victoria»
Foto: El obispo de Tui-Vigo celebró el oficio de la Pasión del Señor en la concatedral-basílica de Santa María de Vigo

Bajo la mirada del Cristo de la Victoria que preside el altar de la concatedral-basílica de Vigo, a las 18 horas del Viernes Santo, el obispo de Tui-Vigo, Mons. Luis Quinteiro, celebró el oficio de la Pasión del Señor, con el que la Iglesia invita al pueblo de Dios a mirar el madero de la cruz para conmemorar su propio nacimiento y su misión de extender a toda la humanidad el mensaje evangélico de Jesús. Allí, durante la liturgia de la Palabra, el prelado tudense afirmó que «la pasión de nuestro Señor Jesucristo es el testimonio último que él nos ha dado de su amor hacia nosotros. Se entregó hasta el final, totalmente».

Mons. Luis Quinteiro invitó a todos los presentes a recordar las imágenes de la pasión de Jesucristo que «los artistas, de una manera excepcional, han elaborado para que el pueblo cristiano sintiese cómo un Dios puede sufrir» y así, recordando esas imágenes, exhortó a los presentes a sentir cómo está presente la pasión de Jesús, en la pasión del justo que mencionan las antiguas escrituras. En esta línea, el obispo manifestó que «la muerte de Cristo se repite en cada justo que sufre, en cada ser humano que es objeto de injusticia o que, sencillamente, sufre por la enfermedad, por el dolor»

«¿Por qué muere Jesucristo? ¿Por qué sufre el justo? ¿Por qué el ser humano tiene que llevar su cruz?» son algunas de las preguntas que Mons. Luis Quinteiro expresó durante su intervención y que respondió con rotundidad: «Cristo llevó su cruz para redimir y dar sentido al dolor. Por eso, nosotros, los cristianos, sabemos que la Cruz de Cristo es nuestra victoria. Muchos se escandalizan, pero nosotros sabemos que en la cruz de Cristo está nuestra salvación, porque ahí el sufrimiento es redimido y el dolor tiene sentido».

Finalizada la liturgia de la palabra con la oración universal, comenzó el momento de adoración de la Cruz, durante el que se formó una larga fila de fieles que acudieron a venerar el madero, signo del triunfo de la donación y del amor de Jesús. Al término se procedió al rito de la comunión que, tras la celebración del Jueves Santo, se reserva en el sagrario del monumento.

Recogiendo las palabras del obispo de Tui-Vigo durante la celebración del Jueves Santo, el párroco de la concatedral-basílica, José Vidal, invitó a todos los presentes a participar en la “doble” procesión que «no es más que una catequesis viviente a través de las imágenes». 

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