La diócesis de Tui-Vigo ha celebrado la fiesta del Corpus Christi doblemente en la ciudad tudense y en la ciudad olívica con la misa solemne presidida por el obispo Mons. Luis Quinteiro Fiuza. Al termino de estas celebraciones, debido a las restricciones sanitarias y siguiendo las recomendaciones de la vicaría de Pastoral, este año han quedado suspendidas las tradicionales procesiones por las calles.
En ambas celebraciones, el obispo de Tui-Vigo ha recordado a los congregados la importancia de la Eucaristía afirmando así que “la lglesia necesita renovarse en la Eucaristía”, tal y como declararon, en primer, el papa san Juan Pablo II en su carta apostólica Tertio milenio adveniente y Benedictto XVI con la publicación de la carta encíclica Deus caritas est. En este sentido, el pastor de la Iglesia diocesana ha expresado que “vivir la Eucaristía es un compromiso permanente para la renovación de la vida, para construir un mundo juntos, para romper divisiones, acabar con las injusticias y establecer diálogos”.
En esta fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, se rememora que Cristo está presente verdadera, real y sustancialmente en el pan y el vino consagrado; una presencia que se prolonga fuera de la misa en el sagrario. En este día también celebra la Iglesia el “día de la Caridad”, por eso los obispos responsables de Acción Caritativa y Social de la CEE, en su mensaje para esta jornada, recuerdan que “al adorar al Señor en el Pan Eucarístico, nos adentramos en el dinamismo del gozo, la alegría y la esperanza” que necesitan tantos olvidados y marginados en nuestro mundo”.
