El 2 de febrero, coincidiendo con la fiesta de la presentación del Señor en el templo, el movimiento Vida Ascendente conmemora a sus patronos: Simeón y Ana, dos personas judías de avanzada edad que pueden contemplar al Mesías. Al coincidir esta fiesta con la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, Vida Ascendente celebró una eucaristía presidida por el obispo de Tui-Vigo, el 8 de febrero, en el templo parroquial de Nuestra Señora del Rocío en Vigo.
A pesar del temporal, hubo una gran participación de personas mayores vinculadas a este movimiento, tal y como explica Marisa Vidal, coordinadora de la junta gestora de Vida Ascendente: «celebramos con gran alegría la eucaristía, acompañados del obispo, siempre tan cercano, y varios consiliaros». Durante su intervención, Mons. Luis Quinteiro, animó a todos los miembros de Vida Ascendente a continuar con ilusión y confianza el camino de este movimiento, que acompaña a las personas mayores en su camino de fe y les permite ser miembros activos de la Iglesia y de la sociedad.
Al término de la eucaristía, los asistentes a la celebración tuvieron la oportunidad de compartir un rato de confraternización pasando “de la misa a la mesa”, el broche de oro para hacer de la jornada «un día entrañable», tal y como lo definió Marisa Vidal.