El pasado sábado 27 de agosto, la viguesa de adopción sor Diana de la Eucaristía López dio el sí definitivo en la congregación de las misioneras de San José de Cluny, en la capilla del colegio de su congregación en la que, seis años antes, comenzó su camino como consagrada. El obispo de Tui-Vigo, Mons. Luis Quinteiro, presidió la eucaristía en la que participaron familiares y amigos de Diana.
El prelado de Tui-Vigo recordó que «la vocación cristiana es una vocación a un cambio total en nuestra vida. Si nosotros no provocamos ese cambio en los hermanos significa que nuestra vida está siendo una vida sin valor, sin ejemplaridad, lo cual la Iglesia de hoy tiene que sentir profundamente. Nosotros, en nuestras comunidades, debemos crear una atracción hacia algo que va más allá de lo material; hacia algo que de verdad vale la pena». En este sentido, felicitó a sor Diana por el paso que, durante esa tarde, daba hacia la consagración perpetua y, dirigiéndose a ella, declaró «has encontrado esa joya, esa perla [la vocación], pero tienes que ayudarnos a todos también a enseñar esa perla que muchos llevamos en nuestra vida».
El acto de consagración que siguió a la homilía finalizó con el abrazo fraterno de Diana a su nueva familia, la congregación que la acoge en su seno definitivamente, y a su familia de sangre que la acompañó durante todo este proceso. Al término de la celebración religiosa, los presentes, amigos y familia, compartieron un rato distendido en el comedor del para celebrar ese sí definitivo de Diana al plan de Dios, como religiosa de San José de Cluny
Sobre sor Diana de la Eucaristía López
Diana nació en Las Palmas de Gran Canaria en 1980. Viguesa de adopción, es la mayor de 4 hermanos, antigua alumna de San José de Cluny, apasionada de la música y del deporte, maestra y entrenadora de fútbol sala. Ingresó en el noviciado de la Congregación en el año 2014, después de una experiencia misionera con las hermanas de La Plata (Argentina) y con la comunidad del Colegio de S. José de Cluny en Pozuelo. En julio 2016, realizó la profesión religiosa como religiosa de la congregación también en la capilla del colegio vigués.