La iglesia de Santiago el Mayor de Vigo acogerá esta celebración el viernes 12 y el sábado 13 de marzo de 8 de la mañana a 7:30 de la tarde.
El obispo Luis Quinteiro Fiuza presidirá la Eucaristía ambos días a las siete y media de la tarde.
El equipo organizador de la Diócesis de Tui-Vigo invita a miembros de la vida consagrada, asociaciones de fieles y diferentes grupos diocesanos que deseen animar alguna de las horas de la oración a inscribirse cuanto antes a través del siguiente correo electrónico info@afranqueira.org.
El horario, de 8 de la mañana a 19:30 de la tarde, se ha estipulado teniendo en cuenta las restricciones vigentes de movilidad en algunos ayuntamientos y cumpliendo el toque de queda vigente desde las 22 de la noche a las 6 de la mañana. Además, el aforo estará limitado a la capacidad máxima del templo parroquial de Santiago el Mayor de Vigo —situado en la Avenida de García Barbón— y deberán respetarse en todo momento las normas de seguridad e higiene vigentes para combatir la propagación del Covid-19.
Este año, tal y como recuerdan desde la organización, la convocatoria tiene un carácter especial, siendo «más simbólica, incluso podemos decir, más profética y significativa que una invitación a la asistencia masiva. Ahora nos toca, desde la sencillez y lo desapercibido, tomar conciencia de la fuerza de la oración estando en comunión con toda la Iglesia. Adentrarnos en el silencio para ser susurro de plegaria por los corazones dolidos por el sufrimiento. Vivir la sencillez de ponernos junto al Señor y pedir perdón siendo “cacharros de barro” en los que se derrama la Gracia de la Indulgencia y así, ayudar a tantos hermanos y hermanas a caminar en esta peregrinación hacia la Pascua».
Desde el año 2014, el papa Francisco, a través del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, convoca a la Iglesia Universal a vivir 24 horas para el Señor la víspera del cuarto domingo del tiempo de Cuaresma, con el objetivo de profundizar en la experiencia sacramental del perdón y de la adoración eucarística.
Para el lema de este año se ha escogido un versículo del Salmo 103 «Él perdona todas tus culpas» que, tal y como explica la nota introductoria publicada en el subsidio litúrgico, invita a todos los fieles a acercarse al sacramento de la Reconciliación, «preferiblemente en un contexto de Adoración Eucarística». Además, el subsidio, dividido en dos partes, ofrece claves que contribuyan a una mejor preparación de confesión y ayuden a los participantes «en la oración y en la meditación a través de un recorrido basado en la Palabra de Dios».
